¿Qué debo hacer si mi hijo suspende los exámenes?

¿Te parece ver a tu hijo estudiar pero aún así sigue suspendiendo los exámenes? Seguramente te de miedo que llegue a casa con una o más de una asignatura suspendida y que toda su evolución se ralentice. 📉

Bueno, calma, lo primero es no desesperar ni pensar en que será de tu hijo si sigue por ese camino. Porque por mucho que haya suspendido, el futuro de tu hijo no se ha ido al traste. Eso te lo aseguramos desde Profe.com, donde tratamos cada día tanto con alumnos que han suspendido exámenes y asignaturas como con alumnos motivados al 100% con su aprendizaje. Y créenos, que no se trata únicamente de si tu hijo es más o menos aplicado. Profundizamos más sobre esta cuestión en este artículo.

Lo primero que debes tener claro es que los gritos y las broncas monumentales no mejorarán la situación. Lo más probable, es que te alejes más de la relación de confianza que necesitas con tu hijo para mantener una comunicación sincera. Y necesitarás mantener fuerte esa base comunicativa contando con un hijo adolescente en pleno caos emocional. 😵

¿Por qué mi hijo estudia pero no aprueba?

👉 Falta de hábito y técnicas de estudio

Puede que veas a tu hijo hincar los codos durante algunos ratos por las tardes, pero eso no significa que esté logrando el propósito de estudio.

Debes tener en cuenta, que aunque empiecen el colegio desde bien pequeños, nadie les enseña a estudiar como tal. Con los años, puede que ellos solos no acaben de perfeccionar su propio método de estudio para aprovechar al máximo el tiempo y enfrentarse a cualquier examen, ejercicio o libro.

Además, con cada curso que avance, se le exige más, por lo que no es de extrañar que surjan más asignaturas suspendidas. Así que antes de nada, si ves a tu hijo estudiar pero suspender de igual manera, ten en cuenta este factor. Las técnicas de estudio, así como la gestión del tiempo y la organización pueden estar jugando un papel importante en los suspensos de tu hijo. Si no hay unos buenos hábitos de estudio, será más difícil seguir la exigencia de Secundaria y Bachillerato.

👉 Dificultades en el aprendizaje

La detección temprana de cualquier problema que pueda surgir en el aprendizaje de un niño o niña será determinante. Ya sea por una dificultad de aprendizaje como el TDAH, la dislexia o discalculia, como si necesita un apoyo educativo especial por otra causa.

Cuando no se diagnostican estas dificultades en el momento que corresponde, trae una serie de consecuencias emocionales que traducen en fracaso escolar. Y quizás, si se hubieran detectado antes, se podría haber ajustado el aprendizaje a sus necesidades y apenas costaría reconducir su progreso académico.

Recuerda que cualquier estudiante puede alcanzar su máximo potencial. Pero debemos tener en cuenta su ritmo y necesidades de forma personal.

👉 Causas emocionales y/o sociales

Al igual que cada proceso de aprendizaje es único, también lo es el carácter de cada niño o adolescente. Y quizás a uno parece que le da igual suspender y otro lo vive como un gran fracaso.

Si tu hijo suspende un examen, intenta indagar acerca de lo que siente y piensa. Ten en cuenta que los estudios y el colegio es la ocupación de todos los niños y adolescentes y para ellos puede ser causa de muchas de sus frustraciones. Desde las dudas que se quedan enquistadas en el aula hasta problemas con compañeros de clase. El colegio o instituto ocupa gran parte de sus vidas. En este sentido, ayudarle a gestionar sus emociones será algo que le ayudará a rendir con sus estudios de forma indirecta.

👉 Falta de atención personalizada

En una clase de instituto, suele haber falta de atención personal por parte de los profesores. Si uno de los alumnos de entre los 30 adolescentes más que hay en clase tiene una duda o más de una es bastante común que no reciban esa ayuda personalizada. También es habitual que el alumno se guarde las dudas y que se empiecen a acumular.

Si tiene más problemas para aprobar una materia que otra, tiene más dudas, y necesita un refuerzo extra, dáselo. No esperes a que se convierta en algo realmente difícil de digerir para él o ella.

Por suerte, esto trae menos quebraderos de cabeza para los padres, ya que la solución está en el refuerzo escolar y en los profesores particulares. En este caso, te recomendamos las clases particulares online.

En Profe.com encontrarás una solución educativa integral para que tu hijo no suspenda ni un examen más. Para que gane confianza y mejore sus notas de forma flexible, cómoda y asequible.

Cómo reaccionar ante los suspensos de tu hijo

Como padres, siempre queremos lo mejor para nuestros hijos y uno de nuestros deseos es que cada trimestre del curso escolar aprueben las asignaturas. Aprobar todo antes de Navidad, antes de las vacaciones de Semana Santa y obviamente, aprobar el conjunto de todo el curso escolar. Y poder disfrutar de todas las vacaciones del año, sin agobiarse por tener que superar exámenes de recuperación en verano.

Pasar los días libres de obligaciones tranquilos y sin malos rollos en casa y en familia. Qué más queremos, ¿verdad? Y es que, para los padres, uno de los mejores regalos que pueden recibir de sus hijos, es recibir notas de excelente. 💯 Pero y si pasa lo contrario, ¿y si tu hijo está suspendiendo todos o casi todos los exámenes?

La llegada de las notas al final del trimestre o del curso suele ser una escena temida tanto para los hijos como para los padres. Si se da tanta importancia, en parte es porque siempre se ha establecido como un marcador de fracaso o éxito de cara al futuro. Y desde tiempos inmemorables, la reacción de los padres al recibir malas notas ha sido el enfado y el castigo. Pero para revertir la situación de tu hijo suspendiendo, debes mirar más allá.

✅ 1. Busca las causas

Observa qué actitud toma cuando te enseña las notas o te dice que ha suspendido un examen y hazle preguntas con el fin de averiguar qué es lo que le ha pasado. Ten en cuenta que eso es algo que difícilmente conseguirás si de primeras le gritas o le muestras un enfado excesivo.

Desde una posición de entendimiento y apoyo, llegarás mejor a lo que le pasa por la mente.

Prueba a hacer preguntas del tipo “¿te ha costado entender las clases de esta asignatura?”, “¿te pones nervioso cuando haces el examen?” “¿sabes hacer los ejercicios que te manda el profesor?”

El objetivo es sacar conclusiones sobre cualquier cosa que pueda estar afectando a los continuos suspensos.

Posibles causas de que tu hijo o hija esté suspendiendo pueden ser:

• No tiene el ambiente adecuado en casa

• Falta de motivación

• Influencia del entorno y amistades

• Problemas emocionales y de salud mental

• Falta de bases

• Problemas sociales y de adaptación

✅ 2. No entres en pánico y muéstrale tu apoyo

No le transmitas más inseguridad o nerviosismo. Lo que realmente le beneficiará es que le des las herramientas para progresar.

Aprovecha las ventajas que ofrece la tecnología en la educación. Actualmente hay más posibilidades para acompañar el progreso de los alumnos. Por ejemplo, buscar plataformas de clases online es una de las estrategias más útiles hoy en día. Gracias a la flexibilidad que aporta y a las infinitas posibilidades que se pueden incorporar.

Es aconsejable que no esperes a que suspenda una asignatura para aportar ese refuerzo. Adelántate en cuanto veas que suspende algún examen o veas que se le hace más difícil una materia en particular.

✅ 3. Dale confianza y ayúdale en lo que puedas

Si tu ya ves que en el día a día tarda mucho en hacer los deberes o que se desanima porque le cuesta retener lo que estudia, debes estar ahí. Supervisa su trabajo antes de echarle una mano. Está demostrado que estar pendientes de sus estudios otorga un efecto muy positivo en ellos. Ayudar a los hijos a hacer los deberes puede ser muy enriquecedor para él. ¡Ojo! que no estamos hablando de que los hagas por tu hijo. Eso solo le perjudicaría.

Y por supuesto, premia su esfuerzo siempre. Por mucho que te cueste dejar de prestar atención únicamente a las calificaciones, busca felicitarle por sus progresos y su evolución. Siempre ten presente un discurso de superación y de refuerzo positivo. Y cuando necesite una ayuda fuera del colegio, plantéalo como una oportunidad. “Ahora con este profesor particular te será más fácil superar la asignatura. ¡Lo conseguirás!” Reconducir la situación será posible si le das ánimos y no al revés.

Cualquier alumno puede llegar a sacar todo su potencial. En Profe lo tenemos claro. ¡Transmítele tu confianza y a por todas! 🚀

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